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El Tribunal europeo de Cuentas ha acusado hoy a la Comisión Europea (CE) de no supervisar adecuadamente el reparto por parte de los países a los agricultores de los cerca de 4.200 millones de euros de ayuda agrícola durante el periodo 2010-2012.

La crítica se refiere en particular a los derechos de ayuda agrícola del régimen de "pago único", introducido en 2003 y que ha sustituido a la mayoría de los antiguos pagos directos, que estaban vinculados a la producción.

"La distribución de la ayuda disponible por los Estados miembros no siempre fue coherente con los principios y los objetivos de la política (agrícola) y los derechos de pago a veces estaban calculados incorrectamente", han dicho los auditores europeos en un comunicado.

En particular, según el Tribunal, los criterios definidos por los países no respetaban los principios de igualdad de trato para los agricultores, ni la proporcionalidad y la buena gestión financiera.

El autor del informe, Augustyn Kubik, alerta de que "esto puede tener una incidencia importante en los nuevos regímenes de pagos a los agricultores a partir de 2015".

Los auditores recuerdan que la revisión de la reforma de la Política Agrícola Común en 2008, extendió el pago único a los sectores donde todavía no se aplicaba o sólo se utilizaba parcialmente.

"Los Estados miembros disponían de un margen considerable de apreciación al asignar y calcular los derechos de pago", indica el comunicado.

El régimen de pago único se ha introducido hasta ahora en 18 Estados miembros y representa el 54 % de la producción agrícola.

El tribunal recomienda al Ejecutivo comunitario que establezca unas directrices claras de cara a los futuros nuevos regímenes de pago directo y que exija a los países que demuestren que los criterios de reparto son objetivos y no discriminatorios.

Además, le pide que supervise con eficacia la conformidad con los techos de ayudas aplicables y que adopte un enfoque más global para las inspecciones de liquidación.

También le pide que vele por la corrección de los derechos de pago cuyos valores no hayan sido calculados según las normas y se recuperen los derechos indebidamente asignados, así como los pagos incorrectos del régimen de pago único.

Por último le recomiendan que ordene que los organismos pagadores adopten procedimientos claros que incluyan controles eficaces de la fiabilidad de los datos y que los países verifiquen si los derechos de pago asignados son exactos.

Fuentes comunitarias dijeron hoy que la CE acepta las cuatro recomendaciones emitidas por los auditores.

Además, recordaron que Bruselas ya está utilizando herramientas para asegurar la supervisión efectiva del cumplimiento con los techos aplicables y que desde 2014 la CE está reforzando su capacidad de control y está destinando recursos con ese mismo objetivo a los Estados miembros.