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La asociación Ovica ha presentado hoy en la plaza de Abastos de Lugo la marca "Pastores de Galicia", con la que pretende certificar la calidad de productos del ovino y caprino de esta Comunidad autónoma.

La citada asociación de criadores de ovino y caprino de Galicia aspira a "aglutinar al sector del cordero y cabrito" producido en territorio gallego mediante esa iniciativa, en la que colabora la Diputación provincial de Lugo.

Un técnico de Ovica, Carlos Rodríguez, explicó a EFE que la certificación "es la marca de garantía que pretende aglutinar a todo el sector del cordero y el cabrito producido en Galicia en base a un régimen extensivo y semi-extensivo".

El objetivo de ese sello distintivo es "reconocer lo que ya se está produciendo", de acuerdo con parámetros de calidad, "y darle ese reconocimiento", apuntó el representante de Ovica.

Se trata de buscarle "ubicación en el mercado" a toda esa producción y "darle ese valor que hasta ahora no ha tenido", puntualizó Rodríguez.

Actualmente, están asociados a Ovica unos 180 productores de diversos puntos de Galicia, con una cabaña ganadera de 27.000 cabezas de ovino y 3.500 de caprino, explicó.

"La comercialización siempre ha sido el talón de aquiles del sector de ovino y caprino, porque por desgracia no tenemos una regulación de precios en una lonja", explicó el técnic que observó la falta de una "orientación por la que guiarse".

Por ello, los productores deben "luchar contra el sector cárnico como está establecido", añadió, y precisó que la intención de Ovica es garantizar el comercio "buscando un nicho de mercado en base a esa calidad".

En principio, la nueva marca se centrará en "mercados de corto recorrido, de proximidad", para "tratar de poner en valor la vinculación entre el productor y el consumidor final, para que se vea en todo momento la trazabilidad del producto".