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El consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, ha dicho que la comunidad quiere recuperar el espíritu de la extensión agraria, adaptada al siglo XXI, para desarrollar la agricultura del conocimiento, que tiene la respuesta a los retos de la seguridad alimentaria, la productividad, la competitividad y el medio ambiente.

Con estas palabras Olona ha querido destacar la importancia de tener un sistema de asesoramiento para los agricultores y ganaderos, en el transcurso de la clausura de la jornada de presentación de dos proyectos de cooperación de la Alianza Agroalimentaria Aragonesa, Rica y Siasa, ambos orientados a vertebrar un sistema de asesoramiento.

Fuentes del ejecutivo precisan que el consejero ha recordado que el servicio de extensión agraria ha desaparecido en España, y que la "nueva arquitectura de asesoramiento" vendrá a sustituir su importante función.

"El nuevo modelo tiene apoyo público, pero está descentralizado y lo protagonizan los agricultores", ha asegurado.

Olona considera que la transferencia de conocimiento no es viable sin apoyo público y que en países donde se ha privatizado completamente se observa que las empresas desatienden a los agricultores.

Y, además, ha añadido que hay ámbitos de gran impacto de los que el sistema público no puede desentenderse, como el agua, el genoma, la contaminación difusa, las plagas, el clima o los ciclos naturales.

El objetivo es que, con el apoyo de la administración, que financia el 80% del coste del asesoramiento, "y más allá de la simple aportación de dinero", los agricultores tomen las riendas del asesoramiento que precisan.

Los proyectos Rica y Siasa han surgido de las ayudas para cooperación gestionadas por el departamento, cuya primera convocatoria, dotada con dos millones de euros, se produjo en 2016, dando lugar a 30 proyectos distintos.

Olona ha anunciado una segunda convocatoria para los primeros días de marzo, en la que se volverán a adjudicar otros dos millones de euros.

Además, este año se realizará una primera convocatoria de ayudas para la creación de grupos operativos de asesoramiento y en 2018 otra, también de dos millones, para la ejecución de proyectos por parte de estos grupos.

"Estamos inventando un sistema de transferencia de conocimiento", ha concluido el consejero.