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El balance de ventas españolas de carne de cerdo fuera de la Unión Europea (UE) en 2016, que se dispararon un +51,28 %, muestra la "orientación" del sector a competir de "forma eficiente" en los mercados internacionales.

Así lo ha asegurado a Efeagro el director de la Asociación de Productores de Ganado Porcino (Anprogapor), Miguel Ángel Higuera, quien ve "muy positivo" este balance, al demostrar que las acciones de comercio "se están haciendo muy bien" y colocan en el mundo "productos competitivos y muy valorados".

A su juicio, los productores y la industria del porcino han experimentado un "cambio de mentalidad" al darse cuenta de que se trata de un sector preparado para competir mundialmente, pero "sin perder de referencia el consumo nacional".

Según Higuera, "cualquier" progreso dependerá de la capacidad de España para cumplir los requisitos que exijan los terceros destinos y ser más atractivos que países referentes del porcino como Alemania, Brasil o Estados Unidos.

Para este año, prevé un mercado "continuista" en el que China sigue siendo el punto de mira de los exportadores de carne de cerdo.

El país asiático compró a España hasta un 109,9 % más de carne de cerdo que en 2015 y fue el primer destino en importancia en volumen, superando a Francia.

La previsión pasa por mantener una "cuota importante" de mercado con China, a pesar de que se calcula que en el segundo semestre del año Estados Unidos y Brasil aumenten sus envíos por el incremento de sus producciones.

El informe económico anual del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama) detallaba que las ventas españolas de carne de cerdo a terceros países se dispararon un +51,28 % en 2016, con 742.262 toneladas enviadas frente a las 490.653 toneladas que se comercializaron el ejercicio anterior.

Si se compara con el año 2014, el incremento es aún mayor, del +96,12 % y en la comparativa con 2013, la diferencia es del +164,8 %.