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Algo más de un centenar de ganaderos de ovino de Castilla y León se han concentrado hoy frente a la Consejería de Agricultura y Ganadería, en Valladolid, para exigir unos precios justos para le leche de oveja que cubran los costes de producción.

Los ganaderos, convocados por Asaja y la Unión de Campesinos de Castilla y León, han protestado por tercera vez en poco más de un año para reclamar de la industria unos precios que, al menos, cubran los gastos de producción, y de la consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, que presione a las compañías transformadoras y distribuidoras.

El presidente de Asaja de Castilla y León, Donaciano Dujo, ha indicado que ahora se empieza a negociar los precios que la industria pagará a los productores en 2019 y ha advertido que los ganaderos rechazarán los que estén por debajo de los costes de producción.

Según el presidente de Asaja, desde 2015 los precios que se pagan a los ganaderos de ovino de Castilla y León han bajado y desde los 0,90 euros por litro de entonces han pasado a una media de 0,72, cuando en el conjunto de España ha sido de 0,77 y en Castilla La Mancha ha llegado a 0,84 euros.

A su juicio, los precios que se pagan en Castilla y León no son rentables y tendrán que llegar, al menos, a los 0,84 euros por litro de leche.

Ha recordado que en esta comunidad operan 2.248 ganaderos que producen 300 millones de litros de leche de oveja, el 60% de la que se produce en España.

Se ha preguntado Dujo cómo es posible que si Castilla y León tiene las mejores explotaciones de ovino y el mayor número de ganaderos los precios que se pagan en esta comunidad a los productores sean más bajos que en otras comunidades autónomas y estén por debajo de la media nacional.

Ha conminado a la consejera de Agricultura y Ganadería a presionar a la industria transformadora y distribuidora para que los ganaderos puedan obtener beneficios, si es preciso "con la retirada de las ayudas públicas".

El coordinador de la UCCL, Jesús Manuel González Palacín, ha asegurado que vender por debajo de los costes de producción ha llevado a que en 2017 haya cerrado el 10 por ciento de las explotaciones de ovino de Castilla y León y a unas pérdidas en tres años de unos 80 millones de euros.

González Palacín ha centrado la responsabilidad de los precios que se pagan a los ganaderos de ovino en la consejera de Agricultura y Ganadería, de la que ha reclamado una actuación "personal" para que los productores obtengan unas remuneraciones justas.

A su juicio, "no puede haber el próximo año" un precio inferior a los 0,84 euros por litro, tras lo que ha expuesto que en Francia, por Ley, los productos agrícolas y ganaderos no se pueden vender por debajo de los costes de producción.

También ha apuntado que los 2.248 ganaderos de ovino generan en Castilla y León unos 5.000 puestos de trabajo directos y unos 10.000 indirectos.