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La carne de ave está salvando la crisis generada por la pandemia del coronavirus y ha incrementado hasta un 25 % sus ventas en la distribución en marzo, que han servido a su vez para reabsorber lo que no despachan a través del canal Horeca debido a su cierre.

Así lo ha asegurado este jueves en un comunicado la interprofesional de la avicultura de carne de pollo (Propollo) que ha analizado la evolución de la demanda de pollo, pavo y otras aves en el canal de distribución durante las primeras semanas de marzo, primer mes de incidencia del coronavirus.

Según los datos de sus asociados, desde el inicio del cierre de colegios y centros educativos, primero en Madrid (11 de marzo), y hasta el día 27 de marzo, ha subido un 25 % la venta de este tipo de carne en los canales de distribución (grandes y medianas superficies, hipermercados, y minoristas) con respecto al volumen habitual, que estaba en torno a las 24.000 toneladas semanales.

En total, se han puesto en los supermercados más de 6.000 toneladas extra en la semana del 9 al 15 de marzo, frente a las 3.600 t en la semana del 16 al 22 de ese mes, y se ha normalizado de nuevo en la semana 23 al 29 de marzo.

Por otro lado, el pavo también registró incrementos en la demanda de la distribución, sin que afectara al ritmo de producción normal.

La subida generalizada en los supermercados estuvo acompañada de una "drástica reducción" del canal Horeca por el cierre derivado del estado de alarma y los puntos de venta directa a los consumidores "han absorbido" esta producción.

Para el secretario general de Propollo, Jordi Montfort, el sector mantiene en activo "todos" sus centros de producción y en estos momentos está comprometido con la salud de los trabajadores para continuar con el abastecimiento normal del mercado, sobre el que se espera una estabilización de la curva de demanda para el mes de abril.

El equipo directivo está en "permanente contacto" con las Administraciones Públicas y Sanitarias para informar al sector de los diferentes cambios en las directrices, siendo una de las industrias con "mayores exigencias y estándares en materia de bioseguridad para todo el personal”, han añadido desde la organización.