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La industria cárnica de porcino ha reforzado las medidas de bioseguridad por la crisis del coronavirus y además de aplicar las recomendadas por las autoridades sanitarias incluyen otras como el refuerzo en los métodos de acceso para empleados y proveedores o la limpieza y desinfección continua.

Así lo ha asegurado este lunes en un comunicado la interprofesional del porcino de capa blanca (Interporc) que ha señalado que esta industria sigue trabajando "a pleno rendimiento" pero bajo "dos premisas fundamentales", asegurar la salud de sus trabajadores y de los productos que llegan al mercado.

Además de esas medidas, para evitar la concentración de muchos trabajadores en las instalaciones, están ampliando el número de turnos en las fábricas y en la distribución, donde se ha reforzado el número de transportes para garantizar el abastecimiento.

Interporc ha destacado también la solidaridad que estas empresas "están demostrando, volcándose" con los colectivos más desfavorecidos y con los profesionales que "luchan" contra esta pandemia.

En este sentido, están realizando "importantes" donaciones de material sanitario y repartiendo producto cárnico entre diferentes centros sanitarios, bancos de alimentos u ONG.