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Los agricultores y ganaderos necesitan más incentivos y capacitación para lograr una producción más sostenible y hacer frente al reto del cambio climático, han señalado este miércoles representantes del Gobierno, productores y otros actores.

En un seminario web organizado por la organización agraria UPA sobre la sostenibilidad del sector agrario y la adaptación al cambio climático, el secretario general de Agricultura y Alimentación, Fernando Miranda, ha insistido en la importancia de transformar el sistema productivo manteniendo la rentabilidad de las explotaciones.

El responsable del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha llamado a dar "incentivos" a los agricultores y ganaderos para que vean que "el cambio merece la pena", y proporcionarles las herramientas para que puedan realizar esa transición.

Los productores pueden enseñarse entre ellos para aprender a utilizar fitosanitarios distintos o bandas multifuncionales que den cobijo a los polinizadores, ha puesto de ejemplo Miranda.

En su opinión, el principal reto en el presente es el clima y el medioambiente, en comparación con la década pasada, que estuvo más centrada en asuntos relacionados con la higiene y la seguridad alimentaria.

El objetivo en la Unión Europea (UE) es lograr una economía descarbonizada para 2050, para lo que los distintos sectores, incluido el primario, deben realizar sus actividades de manera sostenible.

El secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, ha resaltado que necesitan incentivos para lograr una agricultura "más sostenible en todos los sentidos", también desde el punto de vista económico y social.

Para ello ha reclamado acceso a la innovación y la tecnología, así como un reparto "más equitativo" de los fondos comunitarios que están actualmente en la mesa de negociación.

Ramos ha explicado que los agricultores y ganaderos familiares han avanzado en los últimos años en la adaptación de los cultivos, la reducción de emisiones contaminantes y la mejora de los entornos agrarios.

Las cubiertas vegetales, la siembra directa o el uso de semillas mejoradas son algunas de las soluciones que se han puesto en práctica.

Con el fin de mantener sus explotaciones, Ramos ha insistido en pedir "precios justos", haciendo que se cumpla la ley para evitar cobrar por los productos menos de lo que cuesta producirlos, trasladar información "útil y veraz" sobre el sistema productivo en España y proteger los alimentos de las guerras comerciales.

El dirigente de UPA ha apuntado que los productores están viviendo el cambio climático "en primera persona" y ha sugerido al MAPA que proponga a España como laboratorio de la UE en cuestiones climáticas, ya que su experiencia puede ser "muy interesante" para otros países del norte de Europa.

A la subida de las temperaturas que afecta a la península Ibérica se suman otros problemas como la escasez de recursos hídricos, la erosión del suelo y la desertificación.

El presidente y consejero delegado del grupo Deoleo, Ignacio Silva, ha abogado por trabajar en la calidad, un elemento "clave" en el caso del aceite de oliva para garantizar un "futuro económicamente sostenible", y a mejorar la trazabilidad y los estándares de los productos.

"La calidad es una manera de evitar la despoblación y proteger la biodiversidad", ha dicho Silva, que ha mencionado el olivar tradicional como un garante de calidad y productor de ciertas variedades autóctonas que hacen falta a las empresas.

El director general de Bayer Cropscience, Protasio Rodríguez, ha indicado que "la digitalización de la agricultura permite dar acceso a herramientas para utilizar productos de sanidad vegetal" y que aumentar la productividad de las semillas es una forma de "reducir la huella ambiental de la agricultura manteniendo sus niveles de producción".

Ha destacado el trabajo de la compañía para lograr semillas más tolerantes a la sequía y su compromiso de reducir en un 30 % las emisiones de gases de efecto invernadero en los próximos diez años.

Por parte de la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), su vicepresidenta, Ana Etchenique, ha apostado por "indicar el valor además del precio de lo que se compra" y dar pautas a los consumidores sobre cómo alimentarse de manera sostenible.

El biólogo de la organización SEO/Birdlife José Eugenio Gutiérrez ha considerado que "no tiene sentido" disociar la producción y la sostenibilidad, y ha defendido "recuperar la biodiversidad para transformarla en rentabilidad" y lograr un cambio de modelo que "no suponga un menoscabo en la renta agraria".