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El ministro español de Agricultura, Luis Planas, se mostró este lunes convencido de que el resultado de la cumbre europea, en la que se debate el fondo de recuperación tras la pandemia y el presupuesto comunitario para el periodo 2021-2027, será "una buena base" para la reforma de la Política Agrícola Común (PAC).

"Estoy convencido de que su resultado podrá ser una buena base para esta Política Agrícola Común que estamos discutiendo", declaró el político antes de participar en una reunión de ministros de Agricultura que se celebra de manera presencial hoy en Bruselas.

Planas reconoció que la cumbre europea, que este lunes llega a su cuarta jornada, es "muy importante sin duda para todos los temas de la Unión Europea, para las perspectivas financieras, para el fondo de recuperación".

"Pero como ministro de Agricultura quiero subrayar la importancia que tienen sus conclusiones en materia de agricultura y desarrollo rural. El presidente del Gobierno (Pedro Sánchez) lo indicó el pasado viernes antes del inicio del Consejo (Europeo). Constituye, sin duda, una de las prioridades de España", comentó.

Durante la reunión de ministros de Agricultura, se mantiene un debate sobre los reglamentos estratégicos de la futura PAC, cuya entrada en vigor está prevista para enero de 2023.

"En relación con el reglamento de los planes estratégicos de la PAC, el reglamento horizontal sobre planes estratégicos, estimamos que la presidencia alemana (rotatoria de la UE) quiere concluir un acuerdo político en el Consejo (los países) de todo el paquete para el mes de octubre", apuntó.

Añadió que España apoya ese planteamiento porque "de esa forma podremos tener ya los planes estratégicos, el borrador español, listo para principios del año que viene y presentado oficialmente a mitad de 2021, de tal forma que pueda ser aprobado por las instancias europeas".

"Como ya parece cierto, la nueva PAC entrará en vigor en el año 2023; es decir, que en el año 2021 y 2022 se aplicarán las reglas de la antigua PAC con el nuevo presupuesto", completó.

En el encuentro de este lunes, también se aborda la estrategia "De la granja a la mesa", la cual plantea que para 2030 el 25 % de la superficie agraria total de la Unión Europea sea ecológica, que el uso de fertilizantes se reduzca "al menos en un 20 %" y el de fitosanitarios en un 50 %.

Asimismo, propone, con vistas a 2030, recortar en un 50 % las ventas de antibióticos tanto para animales de granja como en la acuicultura.

El ministro español consideró que los objetivos de esa iniciativa son "importantes" y deben apoyarse.

"Pero hay tres aspectos que nos parecen muy importantes: la necesidad de un presupuesto suficiente, la necesidad de un tiempo para su aplicación, de un periodo de aplicación y de transición, y en tercer lugar, la flexibilidad teniendo en cuenta las diferencias desde el punto de vista productivo de agricultura y ganadería", apuntó.

"Y un aspecto que no es menor: si los europeos adoptamos reglas más estrictas para la producción agrícola y ganadera en el marco de la Unión Europea, tendremos que aplicar unas reglas semejantes para la aplicación, para la importación de países terceros", agregó.